El TSJPV deniega a Inama el permiso medioambiental

El Tribunal rechaza un recurso de la empresa para recobrar la autorización retirada por Lakua

DEIA - IMANOL FRADUA - Viernes, 31 de Diciembre de 2010 - Actualizado a las 05:47h.

MUXIKA. La empresa Inama ha vuelto a recibir otro severo revés judicial. La firma ubicada en la Reserva de la Biosfera de Urdaibai no ha logrado que la Sala de lo Contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia del País vasco (TSJPV) haya dictado un auto a su favor en el litigio judicial que abrió para solicitar la suspensión cautelar de la orden del Departamento de Medio Ambiente del Gobierno vasco de retirarle la Autorización Ambiental Integrada -la denominada AAI-. Y este es un permiso gubernamental indispensable para poder seguir con su actividad.

Esa licencia ambiental, con la que deben contar las empresas más contaminantes de Euskadi para cumplir con las directrices medioambientales europeas, le fue suspendido a Inama por el Gobierno vasco mediante una orden emitida en julio del pasado año -tras dos plazos que caducaron sin efectos positivos-, ya que no cumplió con las medidas correctoras necesarias para regular sus focos emisores.

Posteriormente, los responsables de la empresa presentaron un recurso contra esta decisión, motivado por "los perjuicios económicos" que la suspensión de actividad industrial le acarrearía a la firma y a sus empleados. Además, también alegó que el incumplimiento de la declaración de caducidad de su AAI "no deriva daños relevantes para el medio ambiente". De igual forma, el Ayuntamiento de Muxika inició el expediente de revocación de la licencia de actividad -que hasta la fecha no ha concluido- varios meses después, obligado por el movimiento efectuado por la Consejería de Medio Ambiente con anterioridad. Y en esta ocasión, la solicitud de la firma maderera ante el tribunal no ha prosperado, ya que la valoración del TSJPV conlleva a que "no puede estimarse preferente la continuación de la actividad industrial respecto a la protección medioambiental". Sin embargo, la resolución dictada puede ser aún impugnada por la empresa muxikarra.

INTERÉS GENERAL

Es decir, el tribunal considera que "debe anteponerse" el interés general, y por ende el medioambiental y el de los vecinos que habitan en las inmediaciones de la planta -y que llevan años denunciando los efectos nocivos para la salud que genera-, frente a interés de una empresa que cuenta con una plantilla de 150 trabajadores y que actualmente es una de las empresas más importantes en volumen de operarios en el tejido económico de Busturialdea.

Los responsables de Inama han tratado en años anteriores, aunque sin éxito ya que la modificación urbanística municipal necesaria para ello fue desestimada por el Gobierno vasco, de ampliar la planta con el argumento de cumplir la legalidad. Mientras tanto, los empleados de la planta de fabricación de tableros aglomerados ven peligrar el futuro de la empresa por el callejón sin salida en el que parece haberse internado. Por ello, han iniciado contactos con distintas instituciones para salvar el futuro de la planta en su actual ubicación.

La firma incluso ha reconocido el incumplimiento de la veintena de condicionantes -tales como la instalación de un electrofiltro- que le fueron impuestas por el Gobierno vasco para poder contar con su autorización ambiental. Y esos aspectos atañen precisamente los principales focos de emisión de partículas "con mayor potencial contaminante", según estima el TSJPV en su auto. De esta forma el futuro de Inama en Muxika se va tornando cada vez más oscuro, ya que cumple con los preceptos para continuar con su actividad o, sin ella, la situación abierta podría desembocar en el cierre definitivo de la empresa.